MINI GUÍA DE CULTIVO
1. Elección de la semilla
Lo más fundamental en este proceso es elegir una buena semilla en cualquier banco de semillas garantizado. Podemos empezar distinguiendo:
Índicas: hoja ancha, de color verde pálido, plantas pequeñas de menos de 120 centímetros. Colocón potente y sedante. Ejemplos: Afgana, Hindú Kush.
Sativas: hoja lanceada y estrecha, de color verde profundo, plantas grandes de más de 100 centímetros. Colocón cerebral con efectos estimulantes. Ejemplos: Thai, Colombiana, Nepalí.
Híbridas: cruce entre índica/sativa, hoja estrecha o ancha, de color variable, pues cogen características del padre y de la madre, plantas medio/pequeñas de 120 a 150 centímetros. Resultado de cruces genéticos y estabilizadas, aseguran un buen cultivo. Colocón variable según relación genética índica/sativa. Ejemplos: Skunk, Northem Lights, Shiva Shanti y la gran mayoría de variedades comerciales.
2. Germinación de las semillas
Se dispondrán las semillas sobre una turunda de algodón bien empapada en agua, que depositaremos sobre un plato de café, para que se mantenga la humedad. A los pocos días se abrirán dejando asomar un punto blanco de raíz; en este momento debemos poner la semilla con la raíz hacia abajo en tierra a un centímetro de profundidad y taparla ligeramente con tierra. Seguidamente se levantará un largo cuello con un par de falsas hojas seguidas del primer par real. Éstas tendrán peciolos en número de 3 a 11, aunque lo común sea de 5 a 9 peciolos por hoja. Mientras esto ocurre, podemos preparar un semillero con una bandeja o unos vasos de plástico (siempre con agujeros para evacuar el agua de riego); prepararemos una mezcla de tierra muy porosa mezclada con arena, para que las semillas germinadas puedan enraizar fácilmente. En una semana la planta dispondrá de 2 ó 3 pares de hojas.
3. Agua, humedad, luz
Durante los primeros estadios, la planta necesitará agua cada 2 ó 3 días; habrá que procurarle una humedad alta y constante en la medida de lo posible (por ejemplo, con celofán alrededor de la maceta más pulverización de agua); al menos 6 horas de sol directo y más de 7 horas de la máxima claridad posible, es decir, un total de más de 13 horas de luz. Habitualmente se suele plantar en la luna creciente de marzo o abril.
El riego será cada 2-3 días durante el ciclo de crecimiento o vegetativo. Llegada la época de la floración, disminuiremos el ritmo de riego a cada 5 días.
4. Preparación de la tierra
La mezcla de tierra deberá ser neutra, con un pH = 6'5-7, procurando que no baje nunca de 6; conviene vigilarlo, pues la planta no absorbe el fósforo, importantísimo para la floración, si el pH es inferior a 6'5. En centros de jardinería, grandes superficies o cooperativas agrícolas, se pueden encontrar kits básicos para medir el pH de la tierra mediante papel reactivo.
La composición y calidad de la tierra también es muy importante. Conviene hacer una mezcla esponjosa que facilite el enraizamiento e impida el encharcamiento de agua. Ejemplos: a). 1/3 tierra de castaño o substrato universal, 1/3 humus, 1/6 perlita, 1/6 arena de río; b). 1/2 substrato universal, 1/4 arena, 1/4 lava volcánica; c). 1/3 substrato universal, 1/3 compost, 1/6 perlita + 1/6 estercolante.
La perlita, la arena, la lava o roca volcánica y la arlita o arcilla expandida cumplen la misma función, airear la tierra. Se pueden intercambiar entre sí en las distintas recetas.
5. La planta en la maceta: abonado y riego
A las dos semanas podremos pasar las plantas del semillero o vaso de plástico a las macetas, aumentando su diámetro progresivamente cuando la planta y sus raíces lo requieran, controlando el pH de la tierra y añadiendo estercolante ligeramente a partir de la cuarta semana. El ritmo de riego será de cada 3 días.
Se elegirán abonos con alto porcentaje en notrógeno (NPK: 20-12-12 o bien 20-10-10). Se abonará una vez por semana, muy ligeramente, a no ser que la planta lo pida.
Se aconseja un " riego de lavado" cada mes para evitar la acumulación de sales en la tierra (2 litros de agua por litro de tierra).
6. Trasplante
Es aconsejable practicar al menos un trasplante antes de su ubicación final; aumentando el diámetro del recipiente cada vez (trasplante sucesivo). Se trasplanta en las horas tardías y cuidando no dañar las raíces; si el lugar final es un tiesto, deberá ser de diámetro superior a los 40 centímetros o, su equivalente en tierra, 30 litros.
Es muy importante no exponer el tiesto al sol directo para evitar el sobrecalentamiento de la tierra. Es suficiente con poner algo que haga sombra al tiesto y a la tierra.
SER TORPE YA NO ES EXCUSA, A PLANTAR!!!
2 comentarios
Anónimo -
eu tamen quero o porno
ESEEE MATERIAAALLL
luxy -
teñoa bte xunga, a tia dixome 3 semanas de reposo.
sinto non poder levarxe eso, sei q o qeres mais q a min jejej.
si m miras pola camieta avisa si?bikoliños variados****pasdeo ben!!